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Efecto griego pega al peso
Julio 2015
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![](mailto:?subject=Efecto griego pega al peso&body=Por Sergio Rodríguez Colín.
A finales de 2014 los expertos en materia económica pronosticaban un tipo de cambio presionado para este año, como consecuencia de la caída en el precio del petróleo y la evolución política monetaria de Estados Unidos. Las mejores estimaciones oscilaban entre 13.80 y 14.30 pesos por dólar. Sin embargo, en los últimos meses hemos visto que tales rangos han sido superados, ya que el tipo de cambio actual está entre los 16.00 y los 16.10 pesos.
De acuerdo con Javier Obregón Ruiz, asesor económico de la Fundación Humanismo Político del GPPAN en el Senado, está depreciación del peso frente al dólar se debe principalmente a que el mundo vive hoy en día un entorno volátil complicado que le está pegando a nuestra moneda, como resultado del ajuste económico de Estados Unidos por un lado y por otro lo que está pasando en Europa, principalmente en Grecia.
El licenciado en Economía por el ITAM explicó que estos dos factores han obligado a los inversionistas a mover su dinero, pues al interactuar entre sí, los grandes capitales han decidido diversificarse en el mundo y meterlo en varias bolsas, siendo su principal destino la estadunidense.
Como estaban las cosas el año pasado, explicó, Estados Unidos no te pagaba mucho por cada dólar que tú tenías, te pagaba de hecho casi cero porque esa tasa de interés también reflejaba el riesgo del país; si tu metías un dólar ellos te daban el mismo dólar, pero tenías la certeza de que lo tendrías de regreso.
En cambio, si te ibas a Europa, específicamente a Grecia, a pesar de la mala situación financiera de este país -los griegos tenían la solidez y respaldo del Banco Central Europeo-, se aseguraba que pagaban a los inversionistas por cada dólar un dólar y medio.
Sin embargo, la mala economía de esta nación europea obligó al gobierno griego a declararse en suspensión de pagos, lo que generó una huida de capital ante el miedo de los inversores de perder sus dólares. De esta manera, el mundo fue testigo de cómo los flujos de capital salieron de Grecia, salieron de Europa y se trasladaron a Estados Unidos, es decir, tomaron sus euros y los convirtieron en dólares, apuntó.
“En términos de oferta y demanda lo que sucede es que el mundo está experimentando una presión de demanda de dólares, la gente quiere muchos dólares para cubrirse del riesgo griego. Qué sucede ahora, si nos vamos a la parte mexicana tenemos oferta y demanda de pesos y dólares, pero qué pasa cuando del sector externo hay una mayor demanda de dólares, pues inmediatamente nuestra moneda se deprecia frente al dólar por esa razón”.
El economista señaló que al declararse el gobierno griego en <em>default</em>, lo que ocasionó fue una gran demanda por dólares, lo que a la postre afectó al peso. Aclaró que en este caso el peso no se está depreciando por sí mismo, lo que está sucediendo es que el dólar se está fortaleciendo frente al resto del mundo porque al ser una economía grande está atrayendo mucho flujo de capital.
Es aquí, dijo Obregón Ruiz, donde vemos el otro factor: el jugador Estados Unidos. Esta nación tuvo sus problemas en particular, los cuales ha ido resolviendo poco a poco hasta tener en la actualidad una mejora con respecto a su poder adquisitivo.
“La economía de Estados Unidos tuvo un empuje muy interesante por parte de la caída del precio del petróleo, pues reactivó su economía y generó mayores empleos, lo que originó presiones inflacionarias; ante esta situación, el Banco Central de los Estados Unidos, que antes tenía sus tasas de interés casi en cero y para contrarrestar el aumento de la inflación, decidió subir la tasa de interés y al hacerlo atrajeron a un mayor número de inversionistas, quienes llevaron su dinero a ese país”.
<strong>Estable, precio del dólar</strong>
Javier Obregón estimó que el tipo de cambio durante el resto del año se mantendrá como hasta el día de hoy, pues según declaraciones del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, México cuenta con las reservas internacionales suficientes para hacer frente a esta presión cambiaria, además de que tiene una línea de crédito flexible con el Fondo Monetario Internacional.
“Ante este tipo de presiones lo que sucede es que el Banco de México subasta dólares a precios mucho más bajos para que la gente vea al país como un buen lugar para invertir; de esta forma, se controla la fuga de capitales y se evita la depreciación del peso mexicano”.
El economista concluyó que por la parte financiera los factores de esta fluctuación son en primer lugar Europa, pues provocó que los capitales se fueran a Estados Unidos y en segundo las propias decisiones que está tomando la nación americana, las cuales hacen que nuestro tipo de cambio se vaya disparando a niveles como los estamos observando de 16 pesos o más.
Mientras que por la parte real, continuó, existe un piso que rondaba los 13 ó 14 pesos por dólar; ese es nuestro piso, eso es lo que vale nuestra moneda en términos de intercambio de bienes y servicios tal cual con los Estados Unidos, sólo se le agregan dos pesos por dólar, lo que refleja los términos de volatilidad que existen actualmente en el mundo.
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